Columna: “Defendamos a Cojedes”. Diario:
“Las Noticias de Cojedes”. Fecha: 25/04/2015
EL RÉGIMEN NECESITA UN “PSICOANLISTA GERENCIAL”
Saludos cordiales amigos(as) “Defensores de las ideas y conductas equilibras de los
gobernantes”, agradezco perpetuamente sus valoradas expresiones de aprecio
para este servidor, sobretodo las sinceras palabras de respaldo para los
juicios y apreciaciones por aquí desarrolladas, gestos que alimentan el
espíritu y el autoestima de quienes nos atrevemos a crear opinión pública en
esta convulsionada sociedad. En tal sentido, hoy despliego “las persianas de
esta ventana” con el propósito de tocar a fondo algunos aspectos inherentes a
la mentalidad y al comportamiento de
quienes rigen la Política de Estado a nivel nacional, más aún,
con el propósito de plantearle al ciudadano común que amablemente –en forma asidua- lee estos enfoques, a
que reflexione (piense y analice), en el ¿Por qué? Venezuela necesita un cambio de dirección, de sentido, de rumbo, de
actitud de quienes “Manejan” al país…
¡La nación no avanza, venimos en
retroceso y lo peor, nos conducen hacia un
profundo voladero!
Ahora bien, en una conversa inusitada con un “viejo bregador resabiado”, como dicen, “ al cabo de la calle” [léase: no lo engaña nadie],
me decía en forma alegórica, “Caramba chico,
lo del país se parece a un autobús lleno de gente que le piden al chófer que no
coja ese camino que la vía es peligrosa, y nada, ¡pa´lante, es por allí!… El
tipo, ni bolas. El gentío sigue chillando, que ¡cuidado, frena, devuélvete,
coge otra vía!... El conductor contesta, no joda dije que es pa´llá. De repente
el autobús entró en un túnel oscuro y empinado, donde comenzó a patinar, subía
pujando y el chófer le arriaba la pata y avanzaba muy poco, de un momento a
otro, comenzó a deslizarse, pero en retroceso, ya los frenos no le aguantan
para contener su desplome… La gente está encrespada y saturada de la porfía de
quien tiene el volante… El guía -en su maniática torpeza- le echa culpa a San Imperio,
a la Empresa
de la vía, al Fabricante del Autobús, al
Combustible, a la Ley
de gravedad… y por último acusa a los pasajeros por gordinflones… amenazando
con cárcel al que diga lo contrario”. El mismo viejito me dice, yo creo que la solución no será lanzarse del carro, sino en cambiar al
desequilibrado que está en el volante.
Esta alegoría que me contó “el ocurrente Salomón”, puede resonar jocosa, pero en el fondo
describe la forma como un gentío ve la crisis nacional. Esa óptica popular es compartida por “un bojote
de gente humilde” de quienes los conductores del colectivo país no han querido oír,
interpretar y mucho menos proteger y salvaguardar en su peculio familiar Hay
que estar desequilibrado para no asumir la responsabilidad otorgada, exponiendo
incluso la seguridad personal, insistiendo en “echarle el muerto a otro”, incluso al propio pueblo que les dio las
riendas del gobierno. Por tales razones, la recomendación del título de este
escrito es válida, a sabiendas que El
Psicoanálisis es un método de observación e investigación de la conducta y
de la mente humana, que trata de comprender y explicar su funcionamiento, para
abordar con el paciente (el gobernante) sus conflictos y tratar sus
dificultades (hacerlo entender que los problemas están en su mentalidad,
reflejados por su conducta indolente).
Aunque El
Psicoanálisis fue iniciado por Sigmund
Freud hace más de cien años, el método ha ido evolucionando de forma
considerable desde su inicio a través de sus seguidores. Esta vez, al igual que
el “Viejito Salomón”, muchos creen
que se hace necesario adaptarlo y aplicarlo a los dirigentes del país, para generar
unas condiciones de trabajo estables para el paciente con sesiones permanentes
durante 6 años, ya que la comprensión de los procesos inconscientes y del
origen de los problemas de los gerentes y los cambios de conducta requieren un largo
y laborioso trabajo, de los especialistas, en especial en lo económico donde se
siente aún más la locura oficial.
En fin, el “Autobús Venezuela” ha de ser conducido
por el camino que nos lleve a mejor calidad de vida, tratando de extraer el problema, de su mala
conducción, de la propia mentalidad y conducta de quien tiene las riendas
agarradas. En el país, se necesitan varios “Colegas
de Freud” para acabar con “la terquedad maniática” de los que
ascendieron al poder. No obstante, requiere aún más los sentidos de muchos
bregadores como el “Resabiado Salomón”,
que no se queda callado, ni se hace el loco sintiendo los dolores de su estómago
“ pega´o del espinazo”. Nos vemos
en siete días.
Autor: LARRIS EDUARDO SILVA LARA.
[Ingeniero Agrónomo. Licdo. (Esp.)
Educ. Técnica. Tasador Profesional.
Consultor Ambiental ]
E-mail:
larris_silva@hotmail.com; Twitter:
@larris_silva. Blog:http://larrissilva.blogspot.com.
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