[“Las Noticias de Cojedes”.
Sábado: 27/12/2014]
Defendamos a Cojedes
AÑO
VIEJO… “LLEVATE ESE MALEFICIO”
Amables
amigos y amigas “Defensores de la
sucesión natural de las cosas”, agradezco encarnecidamente ese estimable y
consecuente apoyo que ocuparon para con esta ventana de opinión, exteriorizado
de forma muy sincera en cada “cruce de calle” donde gratamente nos tropezamos
durante el año que se va… Eso es inevitable, este 31 de diciembre finaliza un
período de 365 días y 6 horas, que marca el final de un ciclo, de una sucesión
natural y cuando le digamos esa noche ¡adiós
año 2014! Y ¡bienvenido año 2015!, significa que sobrevivimos a la dos mil
catorceava vuelta que dio La
Tierra alrededor del Sol, después del nacimiento de Cristo (d.C.). Durante este movimiento de
Traslación, a una velocidad de 29,7 kilómetros por segundo, el planeta a su
vez giró 365 veces sobre su propio eje, en cuya rotación nos brindó la
oportunidad de recibir los rayos vitales del Sol y la iluminación reflejada de la Luna , marcando la sucesión de
los días y de las noches, como lapsos cotidianos del paso del tiempo, aspectos
trascendentales para los seres mortales y la evolución de sus civilizaciones.
En
consecuencia, resulta válida la referencia cristiana y sideral del paso del
tiempo, la cual nos impone la indetenible dinámica celestial
de las fuerzas naturales, por lo que, muchas veces, ante los infortunios
terrenales nos reconfortamos inermes al decir jocosamente… ¡tranquilos, este mundo da muchas vueltas… hoy puedes estar en el poder, pero mañana puedes perderlo!. Asimismo,
es imposible “decirle al planeta”… !Detente,
que aquí yo me bajo!, este mundo no se para por nadie ( ni por nacer y menos
por morir), la vida continua, ningún mortal es supremamente indispensable en el tiempo, solo se puede ser
significativo fugazmente. Es decir, al final de este trayecto vital es
necesario que cada quien haga una revisión unipersonal del influjo de sus
acciones y omisiones que afectaron su desempeño social, evaluando objetivamente
su calidad de vida como integrante de una familia, asumiendo una posición de
reflexión-acción, de cara a los avatares socioeconómicos y políticos que se
vislumbran para el año 2015.
Así pues,
muchas personas, con la tradición de “las
12 uvas del tiempo”, aspiran comenzar con “buen pié” el recorrido de la
vuelta 2.015. Sin embargo, es indispensable que cada quien medite, planifique y
emprenda iniciativas tendientes a cristalizar cada uno de los deseos elevados
al sonar las doce campanadas de despedida de este año que se va, ¡”ojala, bien maletiao¡”. En tal sentido,
como miembros de un núcleo familiar armónico, estamos en la obligación de
cumplir a cabalidad nuestro rol consciente y sensato, en función de satisfacer
a plenitud las necesidades básicas de nuestros dependientes, atendiendo en
forma irrestricta las responsabilidades y compromisos que traerá el año nuevo.
Por ello, ¡no olvides! Mencionar
dentro de tus deseos: la protección de
dios, la salud, la abundancia, el
amor, la paz, la justicia y, por
supuesto, la prosperidad para todos… adosadas con estas plegarias al Ser Supremo [a dios santo], no obvies la
solicitud de un digno empleo con una justa remuneración, aunque esto último
sea un derecho ciudadano adquirido y un deber tácito de los gobernantes.
Es
indudable, “nadie es eterno en el mundo y
el tiempo es el mejor remedio”, los tiempos cambian y no vuelven, debe
existir en el sistema natural y cultural una sucesión permanente, una
alternancia, una evolución progresiva de cambios positivos en la sociedad,
significando para cada persona responsable y consciente, una exigencia, una
esperanza y por sí, un deseo… un deseo
colectivo, para que el año 2015, llegue repleto de nuevas cosas, más y
mejores cosas que el año que se va. No obstante, algo importante que debe traer
el 2015, es la luz de la sensatez en pensamiento y conducta de los gobernantes,
que elimine ese odio ideológico, intestino y egoísta que está llevando “a la ruina” a la sociedad venezolana.
En
conclusión, el año viejo se va y dios quiera “se lleve ese maleficio” cuya
terquedad ideológica enquistada en el seno de los poderes públicos los ha
secuestrado del resto del país, para que
pueda regresar “aqueeeeella democracia”
que, aunque representativa, propiciaba el estado de derecho y de justicia reinante
en tiempos pasados, antes de llegar este régimen “pseudo socialista”. El titular de este artículo, insinúa la
existencia de “un embrujo adosado al año
viejo”, queriendo indicar que los venezolanos desean purificar el ambiente
socio-político para el año nuevo, eliminando esa dañina y pestilente porfía ideológica
retrógrada que sumerge al país en el atraso. En fin, elevemos plegarias, por un año nuevo plegado de oportunidades para
surgir ¡todos juntos!, como ciudadanos
hermanados por el gentilicio nacional, que “nos
amarró el ombligo” a la madre patria… Venezuela. ¡De todo corazón, les deseo un fecundo año nuevo 2015!.
Hasta el año que viene, dios mediante. ¡Cuídense¡
LARRIS EDUARDO SILVA LARA. C.I.: 5.744.398
Ingeniero Agrônomo. Lcdo.
(Esp.) em Educación Técnica. Tasador Profesional. Consultor
Ambiental.
E-mail: larris_silva@hormail.com. Twitter: @larris_silva. Blog: http://larrissilva.blogspot.com