COLUMNA: "DEFENDAMOS A COJEDES". DIARIO: "Las Noticias de Cojedes". Sáb. 31/08/13
VENEZUELA: PAÍS RICO… “CON POBRE GOBIERNO”.
Saludos amigos(as), “Defensores del bienestar”, agradecido por el valorado respaldo a
esta “ventanilla de opinión”,
cuestión que me defiere en espíritu. Hoy quiero “abrirla” para darle “un
vistazo” al círculo pernicioso de la pobreza en Venezuela. Aunque para el extranjero, siendo “muy rico”, por el “bendito petróleo”, no se justificaría que haya tanta miseria en sus
ciudades y campos… la gran realidad es que hay “pobres como jumo”. No obstante, los economistas conservan la firme
convicción, que “la pobreza del país”
no está en el pueblo, sino en la mentalidad política que asuma “las riendas de gobierno”, ya que en lo
que va del siglo 21, ha
tocado administrar “una megaboloña de
dinero”, más de un mil millones de US$
(!una pelusa!), tan gigantesca “montaña de billetes” (que cubrirían el
planeta), recursos escamoteados, despilfarrados, mal invertidos y cuando no los
ha regalado, son “arrebatados” en
malos negocios internacionales, de esto hay “un bojote” de nefastos ejemplos, que signan a la nación como “rica con una pobre y corrupta administración”.
Ilustremos con esta alegoría: “En cierta oportunidad, alguien preguntó a un
extranjero… ¿Cómo percibían a Venezuela allá en su tierra? su respuesta golpea
el gentilicio, dijo -masticando el español-:
Venezuela es como un machuchita que
heredado un gran riqueza y que no sabe que con ella hacer… Pero, lo mayor grave
es, que es fácil a sus tutores engañar y quitársela”. Es asimilable el hecho, que la tutela de la
riqueza le corresponde al gobierno, de allí la desgracia nacional de tener
administradores corruptos, son como “Zamuros
cuidando carne”. En consecuencia, a pesar de percibirse un círculo vicioso
de las causas y efectos de la pobreza en el país, entendidos afirman que el
principal factor que la causa son los “pobres
gobiernos con regencia corrupta” que “engordan”
sus entornos, restringiendo el disfrute de la riqueza al pueblo en general,
evidenciada por: La falta de igualdad en distribución de medios de producción
(tierra, trabajo, créditos - vivienda,
salarios, servicios -); Escasa escolaridad y alto analfabetismo funcional
(baja calidad y cobertura educativa); Alto
deterioro de la base productiva nacional (irrespeto a la propiedad privada);
Bajos niveles de ingreso salarial y rentabilidad comercial, entre otras causas.
Como soluciones posibles, tenemos: en primer lugar, separación de
poderes en garantía de derechos sociales para la ampliación de oportunidades y
capacidades de las personas. Segundo, el Estado debe enfrentar la desigualdad de
distribución de tierras, créditos y servicios sociales. Tercero, reforzar las
políticas de vivienda con servicios
buenos. Cuarto, el problema no es de distribución de ingresos, es un problema
de generación de riqueza, de producción, y sólo puede encararse razonablemente
atacando este punto central. Por ello, el cambio decisivo debe operarse en la
política económica general a través un programa de cambios estructurales, que
reduzca sensiblemente el rol del Estado como productor y como interventor en la
vida económica, pero que refuerce su papel como protector de los derechos de
todos los ciudadanos. Por lo tanto, el gobierno debe llevar a cabo estrategias
que permitan: 1.- Estabilidad Macroeconómica (eliminar controles de divisas,
intereses, precios bienes y servicios). 2.- Economía de Mercado (para que la
gente produzca y compita por su cuenta). 3.- Seguridad Jurídica y 4.- Seguridad
Social y Personal (sin seguridad para invertir, trabajar y resguardar los
bienes e integridad personal resulta ilusoria toda política a favor del
desarrollo económico).
En
resumen amigos, el gobierno venezolano ha fracasado “como tutor” de la riqueza nacional, no se puede creer nuestra
realidad como país petrolero, con tanto “billete”
que ha entrado en estos últimos años, “da pena ajena” el ruinoso balance de la
economía nacional, la inflación más alta del mundo, la escasez, la corrupción,
la deuda pública y la miseria social en la cual vive la mitad de los
venezolanos. En fin, sin ser expertos se puede apreciar que la mayor pobreza del país no recae en su pueblo, si no
en la mentalidad de quienes han llegado al poder para su propio usufructo, en
detrimento de los derechos sociales y económicos de los genuinos “dueños de la riqueza” (todos los
venezolanos). La gran fortuna del pueblo “estará
en su mano”, cuando salga oportunamente de los “pobres gobiernos” que dilapidan sus riquezas, “engordando
sus fortunas personales mal habidas”. ¡Hasta
el próximo encuentro!.
Autor:
Larris Eduardo Silva Lara. C.I.: V-5.744.398. E-mail: larris_silva@hormail.com
Ingeniero Agrónomo. Tasador Profesional. Lcdo.
(Esp.) Educación Técnica. Consultor Ambiental