Defendamos a Cojedes [Las Noticias de Cojedes: 25/07/2014]
En San Carlos: “Los héroes patrios ¡protestan!” [PARTE 1]
Saludos cordiales,
estimados(as) “Defensores del legado
heroico de los libertadores”, remítoles gratitud franca por las palabras de apoyo para con esta
rejilla de opinión. En esta oportunidad, haciendo uso del recurso metafórico
del lenguaje, recogería el sentimiento de rechazo que trasciende de un gran
sector colectivo con profunda conciencia histórica, habitantes de la ciudad de
“San Carlos”, extensible a otros poblaciones que adolezcan iguales
calamidades en sus calles, avenidas y sitios públicos con
patronímicos en honor a héroes de la patria. Titanes que aún representan espíritus bravíos
enfrentados a: la tiranía, la ineptitud y
la inmoralidad de quienes pretendan ejercer gobierno “de espaldas” al pueblo, asumiendo una actitud cobarde y evasiva para
confrontar “los males enemigos” de la
gente, en afán de dar respuesta como lo
hicieron los libertadores… “Hoy
recordados por monumentos, efigies y placas que llevan sus nombres”, sitios
que muestran franca decadencia física, como consecuencia del menosprecio
oficial, que ha conllevado al irrespeto ciudadano de sus normas de uso y
disfrute, convirtiéndolos en lugares de actividad anárquica, donde lejos de rendirle tributo al héroe, le
maltratan su epónima memoria.
En esta alegoría han de
invertirse los roles, cosa que aunque surrealista, resultaría análoga al actual
escenario apático de los <<actores sociales>>… “Las efigies cobran vida y se tornan contestarías frente al gobierno
incompetente, mientras los ciudadanos se quedan como estatuas indolentes por su
omisión y cómplices al fin, por su inacción ante el irrespeto de su memoria
patria”. Leamos: “… Bolívar, con
atuendo militar y capa decorada, se baja
de su cabalgadura encabritada y llama urgente al alto mando y sus leales
oficiales de tropa desde casa La
Blanquera , con asunto de honor republicano (…) temprano en la
mañana, José Laurencio, visiblemente
molesto, con su uniforme de campaña y espada terciada inicia el orden de
palabra, dando saludos y gratitud a los presentes, advierte su indignación
por el irrespeto del gobierno de turno
al permitir el uso de los símbolos patrios con marras politiquerías, y hasta el
mismo nombre del excelentísimo Libertador para nominar a comités partidistas, que lejos de
glorificarlo, lo sacuden en su descanso eterno. Además, pretenden desconocer
nuestra gesta emancipadora de hace 200 años, insinuando que ahora si tenemos
patria y Venezuela es de todos”.
-
Bolívar, con el ceño fruncido, se dirige sus compañeros,
diciendo que: “Auque el Gral. Silva ostente toda razón de indignación, esa ofensa
nacional y desprecio a su legado, ha de
ser tema de orden marcial para los culpables en agenda próxima. Más hoy, nos
reúne el hecho que atenta contra vuestro legado histórico, evidente por los
inclementes actos profanos que se permiten en los lugares estatales que llevan
vuestras nominaciones. Hablo en nombre
de la plaza mayor con mi patronímico, la cual por sus tinieblas, la alta inseguridad
y la prominente ausencia de la autoridad, ya la multitud patriota no la visita
en la noche… ¡Un día de estos, los bandidos tras el velo de la impunidad
reinante, intentarán despojarme de mi espada, mi cinturón, mis botas, mis
chatarreras… y hasta de mi cabalgadura!”.
-
Ricaurte, con enérgico saludo militar, solicita venia
para hablar: “Tenéis cabal juicio en
razón de estar agraviado en el lugar a vuestro honor, también la avenida y el bulevar que lleva su
nombre. Al igual que la avenida con el mío propio, se han convertido en una
mercadería improvisada con desechos malolientes que deslucen la ciudad,
consecuencia de la ilegal ocupación de espacios públicos, refugiada en la evidente falta de regencia, alta tasa de desempleo y la eminente pobreza”.
-
Manrique, una vez concedido el
permiso, expresa: “Hoy rindo respeto por
la tierra que me parió y resucita mi espíritu guerrero en defensa de la ciudad
y el parque nacional que lleva mi nombre. Levanto mi escudo familiar en símbolo
de protesta pacífica, por ahora, ante quienes han permitido que la plaza con mi
epónimo se haya convertido en una vulgar tribuna populista retrograda que
atenta contra mi desprendimiento patriótico a favor del gentilicio cojedeño”.
-
Miranda, con enunciado culto, exclama: “Aunque la plaza en mi honor reside ubicada
en portal de entrada a la ciudad, ha sido convertida en prosaico carrusel rodeado
por inconvenientes ventas de comestibles que le restan excelsitud
a su monumento. Además, no por estar frente al mayor centro de cultura de la villa,
se perciban auras de conciencia republicana, de su seno y alrededores solo se
desprenden olores proselitistas y mundanos contrarios a elevar la jerarquía de
tan ilustre lugar”.
-
Páez y Negro Primero, con lanza en mano exigieron una
avenida cada cual: “Protestando por la
falta de alumbrado público, el deterioro de la calzada y aceras, así como la
falta de rayado, señalamiento y vigilancia policial de ambas calles estrechas”.
-
La
Familia Figueredo , con
más de una veintena de miembros, todos militares: “Exigieron la restauración de su casa natal, renuevo de su plaza,
alumbrado de su calle y el rescate del Liceo epónimo ofrecido para la ciudad de
Lagunitas”.
En fin, la reunión “iva cogiendo calor”, el Gral. Silva tenía el derecho de palabra
abarrotado de muchos héroes patrios que desean manifestar su inconformidad “del maltrato” de sus monumentos. Se condensó un ambiente de
confrontación contra la indolencia oficial… Bolívar, con sus dotes de liderazgo,
calmó la furia y manifestó en el seno de dicha reunión: Se redactará “La Proclama de los sitios públicos de San Carlos”…[Continuará].
Hasta el próximo sábado.
Autor:
Larris Eduardo
Silva Lara. [Ing. Agrónomo; Lcdo. (Esp.) Educ. Técnica;
Tasador; Consultor Ambiental]