Defendamos a Cojedes. [Las Noticias de Cojedes, Sáb.: 17/07/15]
LEGADO “SOCIAL-COMUNISTA”: … “Malestar, Agonía y Ruina de ilusiones”
Saludos amigos(as), “Defensores
del bien común y del respeto a la dignidad humana”, retribuyo con creces su solidaridad pública
para con estas reflexiones, que siempre intentan ser reflejos genuinos de sus
apreciaciones, respecto al deseo colectivo de mejor vivir. Así pues, pretendo abordar ceñidamente la GRAVISIMA realidad
socioeconómica que nos “estruja la
conciencia electoral al colectivo”, propinándonos individualmente una “saparrapanda de carajazos directos al
bolsillos, al estómago, la dignidad y hasta la propia Cédula de identidad”,
condiciones altamente peligrosas que, como pueblo elector, NO DEBEMOS seguir apoyando “a
ultranza” bajo una supuesta “Revolución
Socialista del s.XXI”, con una oferta engañosa de “Proyecto comunista-anticapitalista”, donde el único enemigo “a combatir” es “El Imperialismo Yanqui”… Empero, toda dominación por fuerza bélica o monetaria [llámese: Gringa, Británica, Rusa, China, Iraní, Japonesa o
Extraterrestre], resulta hostil al bien común y por tanto ha de ser
repudiada “de la boca pa´dentro”. ! No
como los pseudosocialistas, que amasan millonarias fortunas en moneda y
territorio yanqui!
Compatriotas, les instruyo el tema: “Entiéndase como bien común, al conjunto de aquellas condiciones de la
vida social, con las cuales ustedes, sus familias y las asociaciones a las que
pertenecen pueden lograr mejorar -día a día- su calidad de vida”. O sea,
que cada quien pueda superar lo obtenido por sus propios antecesores, donde los
nietos mejorarían los logros de sus “taitas”.
Bajo esta óptica, El Bien Común no es
la suma de los bienes de cada uno de nosotros, ya que hablamos es de Calidad de Vida, la cual solo con la conciencia
de todos puede ser alcanzada, aumentada y protegida. Aquí no cabe el fanatismo enfermizo de ideologías
trasnochadas que atentan contra el bienestar colectivo. Requiere nuestra madurez
como ciudadanos, padres de familia y como
electores de gobiernos, y más aún exige la responsabilidad de quienes ejerzan
la autoridad en su momento.
Amigos(as), tanto Uds., como sus más allegados están
sufriendo las consecuencias de las malas decisiones tomadas, sabemos que “errar es de humanos”, pero “no corregir es
de bestias”. Seremos sabios, ¡si
rectificamos el rumbo a tiempo!… Venezuela es conducida “hacia un profundo barranco”, zanjado por
un improvisado modelo social-comunista
frustrado, que sólo les ha servido, en los últimos 16 años, a los “dueños del poder y a sus proxenetas políticos”, quienes en “vil conchupancia”,
han inoculado en el pueblo iluso un “Legado Malicioso” de disgusto personal, angustia familiar, agonía
colectiva, ruina patrimonial y, lo más grave, de sepelio de ilusiones progresistas
en las nuevas generaciones. No obstante, como legatarios de esa “penuria maligna” que hoy nos estrecha
contra una barrera ideológica “de
ponzoñosas espinas”, estamos OBLIGADOS a oponernos -a decir ¡ya basta!-, a defender el futuro de nuestros descendientes y no ser
cómplices de nuestra propia miseria. A tal efecto, un buen comienzo es reclamar
a viva voz la violación de nuestros derechos, de discrepar la “porfía oficial” de no asumir sus deberes y
“escurrir el bulto, echándole el muerto a otros”, al final nos queda “detonar
el cambio”, haciendo uso oportuno del
voto escarmiento, voto conciente o voto inteligente.
Ese legado convertido en la miseria actual -de la gente pobre- en Venezuela,
transita por la contradicción del concepto de
“Bien Común” con anteposición
de opulentos “Beneficios Personalistas” de una sola clase socio-política, que “engorda
y asquea” con la gula del poder. Voracidad intolerante manipulada tras el eufemismo de “revolución
bolivariana” ocultando la farsa del «socialismo del siglo
21», impulsado como primera etapa de una sociedad sin clases o «comunista», prometida
al mero talante populista negativo, para una supuesta organización
colectiva de la producción. Ideología marxista “guillotinada” en contra de la propiedad
privada [llámese:
Industrias, Comercios, Fincas, Hoteles, Bancos, Terrenos, Empresas Radio-TV,
Periódicos y mil etc.], “aplastando al capitalismo”
como aparente forma de explotación del trabajador asalariado, que daría paso a
una pujante producción socialista en sustitución de importaciones [léase: Núcleos Endogenos, Fundos
Zamoranos, Fincas colectivas, Industrias socialistas, Cooperativas Rurales,
entre otras], lo cual ha devenido en esta DESCOMUNAL FALSEDAD,
frustración, desengaño, retroceso, escasez, desempleo, bajo salario, recesión, altos costos, inflación, hambre y
lo peor que ya se anuncia LA HIPERINFLACIÓN , ¡Ave María Purísima!... [Dios y
la virgen iluminen al gobierno y protejan el provenir del pueblo venezolano].
En resumen, esta mentalidad ideológica enfermiza de quienes conducen los
destinos de Venezuela, arrastrándola a un “abismo
sin fondo” por el “Castrocomunismo”,
bajo el remoquete de “socialismo del S.,XXI”
que enterró las ilusiones de varias generaciones del hermano pueblo cubano,
amerita hoy de nosotros, como hijos de Bolívar,
Sucre y Páez un radical cambio de
dirección al grito de “Vuelvan Caras”,
recordando la célebre batalla de “Las
Queseras del medio” (Arauca, 1819), para emular el triunfo de los aguerridos
“Llaneros de Páez” frente a las fuerzas
antipatriotas de varios “Narciso López”,
dirigidas por otro “Morillo”, que hoy
igual que en tiempos de independencia, “se
enconchaban” tras el poder de un nefasto Imperio opresor, esta vez del “imperio
de la falsedad, el populismo y la corrupción ”, con la mala intención de
sepultar las esperanzas de nuestras actuales y futuras generaciones. ¡ Salgamos con los pie juntos
a cerrarle el paso a la
Hiperinflación Legada
Autor:
Larris Eduardo Silva Lara. C.I.: V-5.744.398.
Ing. Agrón. Tasador Profesional. Lcdo
(Esp.) Educ. Técnica Agropecuaria.
Consultor Ambiental..
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