EL RIO TIRGUA... !No es una herencia, sino un Préstamo.!

[Las Noticias de Cojedes. Sábado: 10/01/2015]

Defendamos a Cojedes.

COJEDEÑOS:… ¡“EL TIRGUA” NO TIENE PORQUE MORIR!

Saludos amigos(as) “Defensores de la identidad cojedeña”, extiendo palabras sinceras de felicitaciones -cargadas de buenos deseos- para afrontar le vicisitudes del nuevo año. En estas primeras líneas, les formalizo la grata invitación a participar activamente  en la conformación de una Organización no Gubernamental en defensa y conservación del bien apreciado río “Tirgua”, también llamado río “San Carlos” y por otros conocido, como río “Boca-Toma”, por ser el balneario predilecto para sacar la resaca y aplacar el calor del sancarleño y del foráneo acá reasentado.

Este esplendido cauce de aguas puras, cristalinas, mansas y abundantes  que otrora se ganó el primer lugar “como símbolo de identidad regional”, resaltando a Cojedes y sus habitantes como fuente  exuberante de recursos naturales y  elevados valores culturales, tradicionales y ecoturísticos entre  los estados centrales del país, hoy reclama nuestra representación.  No obstante, tras esta invitación a su defensa, queda al descubierto UNA ADVERTENCIA manifiesta… <<si dejamos sucumbir al “Tirgua”, morirán también los sueños de nosotros mismos – lapidando las esperanzas de nuestros propios hijos – por no hacer nada para recuperar su “semblante vigoroso”  que en tiempo reciente pasado nos fortaleció el gentilicio cojedeño y exaltó nuestro orgullo personal>>.

Amigos y amigas coterráneos, el río “Tirgua” es un recurso natural, escénico, turístico y vital para todos por igual. Si llega “a morir”, será por falla u omisión de sus “benefactores” [sociedad civil] o por ausencia o inacción de los  “dolientes” [tutelares oficiales]. Es decir, el “Tirgua” dejará de dar vida por “el antiparabolismo” de la gente, por “por la vista gorda” del gobierno, o por ambas causas juntas, ¡No hay otra!. Ahora bien, para muchas personas, lo último está sucediendo en la actualidad, y por ello se expone crudamente este caso. En Venezuela, Legislaciones Ecológicas “es lo que sobra”, organismos Ambientales y oficinas burocráticas  “hay pa´tirar pa´rriba” … ¡pero, no funcionan eficientemente. No hay logros!. 

Se cuenta, además de La  Carta Magna, con  54 Tratados y Convenios Internacionales de orden medioambiental; 16 Leyes Orgánicas y sus Reglamentos; 51 Leyes Ordinarias; 56 Decretos Presidenciales y 22 Resoluciones Ministeriales Ambientalistas, que en conjunto suman más de 200 textos legales que regulan este tema en el país y en cuyos contenidos se plasma LA PARTICIPIPACIÓN CIUDADANA como principio de acción y reacción, para que en sí, “no se conviertan en letra muerta”.

La defensa del “Tirgua”, comienza con la unificación de ideas y de acciones sociales, que le “den vida” a esa abundante reglamentación y le “Puye las costillas a los organismos dolientes del ambiente”. El término participación ciudadana, lo interpretamos como las acciones o iniciativas que impulsaren el desarrollo local y la democracia participativa a través de la integración de la comunidad al ejercicio ciudadano, haciendo uso de sus deberes, derechos y obligaciones individuales y colectivas. Sobre todo, de ejercer el máximo poder colectivo de una democracia... El Poder ciudadano para el bien común..

Esta participación, está basada en varios mecanismos, para que la población tenga acceso a las decisiones del gobierno de manera independiente, sin necesidad de formar parte de la administración pública o de un partido político . Una forma aconsejable, es a través de las ONGs las cuales pugnan por ciertos temas sociales sin sustituir en las funciones del gobierno sino proponiéndolas o exigiéndolas, evaluándolas u objetándolas (léase: reclamo colectivo). También puede proponerse a través de la discusión de temas de importancia de los ciudadanos en foros organizados o por otras vías para llegar a un consenso. He aquí “el centro de interés” de esta invitación… para el ejercicio de la democracia participativa bajo el principio esencial de toda convivencia social, LA CORRESPONSABILIDAD.

En resumen, El agua del Tirgua: “no es una herencia de nuestros abuelos, si no un préstamo de nuestros nietos”, si no hacemos nada para conservarlo dando vida y progreso, “le estaremos matando la esperanza a nuestros descendientes”. En fin, amigos, es hora de retribuirle al Tirgua todas sus bondades y quedan gratamente invitados al Colegio de Ingenieros del Edo. Cojedes, para este jueves 15 de enero a las 5:00 pm, donde podrán unirse a una buena causa en DEFENSA DEL RIO TIRGUA. Nos veremos en 7 días.

AUTOR: LARRIS E. SILVA LARA. C.I.: 5.744.398.  

(Ing. Agrónomo. Tasador Profesional. Lcdo. (Esp.) Educación Técnica. Consultor Ambiental).

E-mail: larris_silva@hormail.com. Twitter: @larris_silva.